La NFL puede presumir de ser una de las mejores ligas del mundo, con muchas de sus franquicias en el top mundial de ganancias y valor de mercado, pero está claro que su público aún debe aprender a comportarse porque en cada jornada que pasa hay noticias de aficionados protagonizando trifulcas.

Tras esta situación, que no pasa desapercibida año tras año, no sorprende que en la primera semana de la temporada 2024-2025 de la NFL ocurriera una nueva pelea que reanudara las críticas que asume la liga.

Durante el encuentro de este domingo entre Los Angeles Chargers y Las Vegas Raiders disputado en el SoFi Stadium de California, la victoria 22-10 de los locales pasó a segundo plano cuando comenzaron a llegar los preocupantes reportes de los aficionados que estaban en las gradas y en las afueras del recinto deportivo. Los informes llegaron antes, durante y después del partido.

Golpes, sangre y expulsiones

En redes sociales hablaron en especial de un hecho que ocurrió en el estacionamiento del SoFi, luego que alguien grabara a un aficionado con la camisa de Divine Deablo (Raiders) mientras era golpeado por el rival de Chargers uniformado con vestimenta de Darwin James.

Un tercero en disputa intervino para intentar calmar los ánimos pero el fan de Raiders comenzó a golpearlo junto a una mujer y luego este tercero se unió al combate, culminando con el fan de "Deablo" desmayado en el suelo y ensangrentado.

La pelea no se detuvo ahí porque la mujer nuevamente saltó sobre el seguidor de Maxx Crosby y empezó a forcejear con él hasta que se pudo zafar lanzando a la fémina al suelo antes de dejar la escena.

Un segundo conflicto inició minutos más tarde en la grada cuando también aficionados de Raiders y Chargers se fueron a las manos, inspirados presuntamente en el percance en el campo de juego que tuvieron el receptor de Chargers, Joshua Palmer, con el esquinero de Raiders, Jack Jones; ambos terminaron expulsados del juego.

Peleas en la NFL se hacen regulares

Los acontecimientos que se vivieron en el SoFi Stadium no son nuevos y de hecho, ya existía un antecedente de la campaña 2023-2024 entre seguidores de Chargers y Raiders porque el pasado 1 de octubre también hubo una batalla campal en las gradas que hizo rodar de sus asientos a varios del público. Esto resultó con algunos heridos de golpes que iban y venían, así como también gente bañada en cerveza y algunos hasta expulsados del estadio.

Lo que concierne es que en general la NFL enfrenta un incremento de violencia en los estadios. Por ejemplo, el ocurrido durante el encuentro entre New England Patriots y Miami Dolphins de la semana 2 en la temporada pasada. Ahí una trifulca culminó con un fallecido horas más tarde, presuntamente consecuencia de un paro cardíaco tras una discusión verbal y física según informaron las autoridades locales, pero sin que alguien enfrentará cargos penales.

Además, otro herido con un fuerte golpe en el rostro durante un Chicago Bears vs. Minnesota Vikings se sumó a la problemática antes mencionada del año anterior, lo que ha llevado a que la NFL apunte sobre los casos para encontrar una solución.

La acción de la liga ya tuvo consecuencias este 2024 con una multa conjunta de más de $400,000 dólares para Detroit Lions y New York Giants luego de un gran conflicto durante una práctica colectiva por la pretemporada. Con esta penalización, la NFL espera comenzar a castigar a jugadores involucrados para que sean el ejemplo y eviten conductas que puedan ser imitadas por los aficionados.