¿Qué come Paul McCartney para verse más fuerte que un artista joven a los 82 años?

¿A quién no le gustaría llegar a la edad de Paul McCartney y verse tan vital, y tan activo como él a los 82 años?

El ex Beatle acaba de dar dos conciertos impresionantes en Buenos Aires, Argentina, como parte de su gira 'Got Back', en los que cantó, tocó instrumentos y se movió activamente por el escenario durante dos horas y cuarenta minutos cada día, y los dejó boquiabiertos a todos.

Esto dio pie a que la pregunta generalizada fuera ¿cómo hace para estar tan bien?, porque si lo comparamos con algunos otros de su generación, y hasta mucho más jóvenes, el ex Beatle los embiste a todos, con toda la gracia.

Obvio que su vitalidad no es fruto de la casualidad, sino de un estilo de vida muy cuidado, basado en una alimentación vegetariana/vegana, una rutina de ejercicio constante y un enfoque holístico hacia la salud.

Hace un tiempo, la revista Men's Health mencionó que uno de los pilares de su vida se basa en no comer carne, un cambio que inició hace más de 30 años tras un día de pesca en el que se dio cuenta del sufrimiento de los animales, y claro, también porque su fallecida esposa Linda Mccartney fue la pionera de la familia con el vegetarianismo. Desde entonces, Paul ha eliminado por completo la carne y los productos lácteos de su dieta.

También la revista menciona que a Paul le gustan el Pad Thai, las hamburguesas de yaca, la ensalada italiana panzanella y las galletas crujientes de nueces pecanas.

Y por ejemplo, en los camerinos de sus conciertos, como los realizados en Buenos Aires este mes, pidió filetes de "pollo falso", hamburguesas veganas, tofu, arroz integral, frutas y verduras, y superalimentos como el kale o Cavolo Nero, que come antes de sus shows​.

Pero además de su alimentación, Paul complementa su vitalidad con una rutina de ejercicio diaria que sigue sin la ayuda de un entrenador personal. Su régimen incluye ejercicios de cardio ligero, pesas y estiramientos. Sorprendentemente, una de sus rutinas diarias es realizar una postura de yoga invertida, la parada de cabeza, lo que le ayuda a mantener el equilibrio y la fortaleza de su cuerpo y mente.

También es un fiel practicante de la meditación trascendental, un hábito que lleva desde los años 60, y que le permite manejar el estrés y mantener la calma en medio de su ajetreado estilo de vida.

El descanso también es clave en su rutina. Paul ha mencionado que se asegura de dormir bien, ayudado por la lectura de libros antes de dormir, una técnica que le permite relajarse sin sobreexcitarse​.

Por último, Paul renunció a las drogas y al alcohol en exceso, y alguna vez comentó que sustituyó hace años la marihuana por una copa de vino tinto o un margarita ocasional​.

McCartney es la prueba viviente de que con constancia y hábitos saludables, es posible mantener una vida activa y plena incluso a los 82 años.