En las últimas semanas el nombre de Helena Gualinga se ha hecho popular en redes luego de que fuera vinculada como el nuevo interés amoroso del cantante canadiense Shawn Mendes, sin embargo, la ecuatoriana ya era conocida por la comunidad de activistas debido a su arduo trabajo.

A pesar de haber adquirido popularidad en la esfera del entretenimiento por su nueva relación, la joven de 22 años ya cuenta con un nombre por sus labores como activista ambiental y defensora de derechos humanos.

Nacida el 27 de febrero de 2002, la ecuatoriana es hija Noemí Gualinga, la primera presidenta de la Asociación de Mujeres Kiwcha, comunidad a la que ella también pertenece por haber nacido en Sarayaku en la Amazonia ecuatoriana.

Su trayectoria como activista empieza mucho antes desde su nacimiento, remontándose a la época de su abuela Cristina Gualinga, quien luchó por los derechos de las mujeres amazónicas, comunidad que ha sido históricamente olvidada por las autoridades.

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Este antecedente sirvió para que su madre, Noemí, también sintiera un llamado por la lucha de la justicia y encontrara sus propias causas, convirtiéndose así en activista medioambiental de su territorio y representante de las mujeres de su comunidad.

Pero esta pasión por las causas nobles y su conexión con la naturaleza que la rodea no solo es una herencia de parte de su familia materna. Helena también es hija de Anders Sirén, profesor e investigador del Departamento de Geografía y Geología de la Universidad de Turku.

De este modo, Helena no solo es ecuatoriana por el lugar geográfico donde nació, sino que cuenta con ascendencia sueco-finlandesa. Este cruce multicultural, le han permitido a la joven activista estar rodeada de distintos entornos creciendo en el Amazonia, pero viajando al extranjero para comprender distintas formas de vida.

Entre las principales luchas que la joven activista ha emprendido junto a su familia ha sido la protección y preservación de la Amazonia ecuatoriana frente a la empresas petroleras que por años han querido instalarse en la zona sin importar la destrucción del entorno.

En 2019 a la corta edad de 17 años, Helena se haría presente en la Cumbre sobre la Acción Climática ONU. Aunque en aquella ocasión no fu parte de los expositores sobre la problemática, la ecuatoriana se encontraba a la afueras del reciento con un grupo de jóvenes que se pronunciaban contra la contaminación y las decisiones de los altos mandos frente al problema.

Helena no perdió la oportunidad para unir el cambio climático con los derechos indígenas y se presentó en el lugar con un cartel que citaba "sangre indígena, ni una sola gota más", señalando como las grandes empresas no solo pasaban sobre el medioambiente, sino también sobre las vidas que habitaban los territorios de su interés.

Ese mismo año, Helena asistiría a su primera cumbre celebrada en Madrid, la Conferencia de las Naciones Unidas Sobre el Cambio Climático. Durante su intervención la ecuatoriana enfatizó en como las comunidades eran ignoradas por los gobiernos, los cuales solo buscaban obtener ganancias de la explotación de las tierras.

"Los Gobiernos de nuestro país siguen concesionando nuestros territorios sin nuestro consentimiento a la industria extractiva que está creando el cambio climático. Esto debería ser criminal", condenó Helena durante la COP25.

Es así como la nueva novia del cantante canadiense se ha hecho de un nombre en la lucha por los derechos de las comunidades indígenas y la preservación de territorios como la Amazonia ecuatoriana, selva que forma parte de uno de los pulmones más importantes del continente americano.

Desde las primeras fotografía que se hicieron públicas, la pareja ha sido vista viajando por Latinoamérica compartiendo momentos llenos de romance.

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