Amanda Bynes declara la guerra a un aumento de peso de 9 kilos provocado por la depresión
La querida actriz compartió un nuevo hito en su camino hacia una vida saludable.
A principios de noviembre, Bynes publicó una actualización en su Instagram Stories con una captura de pantalla de su aplicación, contador de pasos. La aplicación mostraba que había caminado 14.895 pasos, abarcando 6,60 millas, y quemando 481 calorías, superando así su objetivo de entrenamiento diario. Junto a la captura de pantalla, la estrella de 38 años escribió: "¡He bajado 6 lbs! 154lbs ahora", destacando su reciente progreso.
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A principios de este año, Bynes se sinceró sobre el impacto de su salud mental sobre su estado físico. En marzo, compartió que su lucha contra la depresión la había hecho subir más de 20 libras. En ese momento, escribió en Instagram: "He aumentado más de 20 libras en los últimos meses por estar deprimida. Ahora estoy mucho mejor y he aprendido a hacer lo contrario cuando no me apetece hacer ejercicio o comer sano." También reveló que su peso era de 162 libras en ese momento y expresó su objetivo de regresar a 110 libras.
Bynes tiene un largo historial de desafíos con la imagen corporal y la salud mental. En 2018, admitió que durante el pico de su carrera como actriz, luchó con inseguridades severas que contribuyeron a su decisión de abandonar Hollywood.
Cuando reflexionó sobre su papel en 'She's the Man', Bynes dijo a 'Paper magazine' que personificar a un personaje disfrazado de niño la llevó a una profunda depresión. "Cuando salió la película y la vi, entré en una profunda depresión durante 4-6 meses porque no me gustaba mi aspecto de chico", dijo. La experiencia de llevar el pelo corto y patillas me hizo sentir "superextraña y fuera de mi cuerpo" y tuvo un impacto duradero.
Sus problemas con la imagen corporal también influyeron en comportamientos que la llegaron a poner en peligro. Durante el rodaje de 'Hall Pass' y 'Easy A', Bynes se volvió adicta al Adderall y experimentó con sustancias como el éxtasis y la cocaína. En el 2012, estas presiones la llevaron a alejarse por completo de la actuación.
Bynes se enfrentó a problemas legales y psiquiátricos en los años siguientes, incluyendo una hospitalización involuntaria de seis meses en el 2013. Más tarde, sus padres revelaron su preocupación por la obsesión que su hija tenía por la cirugía estética y el impacto sobre su salud.
Ahora, sobria y centrada en su recuperación, Bynes sigue reconstruyendo su vida y compartiendo sus progresos con sus fans.