El día que María Félix le hizo un feo a Silvia Pinal en el bautizo de Frida Sofía
La relación entre María Félix y Silvia Pinal ha sido objeto de muchas especulaciones y anécdotas a lo largo de los años. Ambas actrices, iconos del Cine de Oro mexicano, compartieron no solo el estrellato, sino también momentos tensos que definieron su interacción. Aunque se conocieron a través de Enrique Álvarez Félix, hijo de María, su relación estuvo marcada por celos, admiración y una serie de encuentros incómodos.
También puedes leer: Así fue como Frida Sofía sobrepasó las diferencias familiares y regresó a México a despedir a Silvia Pinal
El primer encuentro entre estas dos grandes divas ocurrió en una fiesta organizada por Enrique Álvarez, quien intentaba unir a su madre con Pinal. Sin embargo, el resultado fue todo, menos amistoso.
Según relatos, cuando Pinal se presentó ante La Doña quedó tan impresionada que no pudo articular palabra. Al notar la reacción, María no dudó en pedirle que se retirara, argumentando que ya había tenido suficiente de su compañía.
Este episodio dejó claro que la relación entre ambas no sería sencilla.
El bautizo de Frida Sofía
Un momento significativo en la relación en 1992, durante el bautizo de Frida Sofía, hija de Alejandra Guzmán y Pablo Moctezuma. En este evento, María Félix fue elegida como madrina. Sin embargo, impuso una condición peculiar: no quería que nadie estuviera cerca durante la ceremonia para asegurarse de que toda la atención estuviera sobre ella.
Esto llevó a que Pinal, a pesar de ser la abuela, se mantuviera alejada del evento para evitar ser capturada por las cámaras, lo cual refleja el delicado equilibrio entre sus personalidades.
"El bautizo de Frida lo hicieron en un cuartito de la casa de Estela (Moctezuma, la abuela paterna). Y Enrique ( Guzmán) por un lado y yo por otro, esperando a que terminara, que bautizan a Frida porque ella (María) no quería que nadie estuviera. Y fue duro. Yo lo veía y se me escurrían las lágrimas, como en película de (Juan) orol; yo lloraba y lloraba. Y mi hija bautizando a mi nietecita ahí adentro", narró Silvia Pinal en una ocasión.
"Todo mundo piensa que es por mi abuela Pinal (que María fue mi madrina), pero de hecho no y no es que no se llevaran bien, pero es que María era tan diva que era: 'o yo sola o no voy'. "Entonces, dejaron a mi abuela fuera del bautizo", relató la propia Frida.
A pesar del distanciamiento público y las tensiones pasadas, se dice que al final del bautizo ambas actrices lograron saludarse cordialmente lejos del bullicio mediático. Este gesto podría interpretarse como un reconocimiento tácito del respeto mutuo que existía entre ellas a pesar de los conflictos.
Una admiración complicada
Aunque Silvia Pinal siempre expresó admiración por María Félix, la realidad era que su relación estaba llena de tensiones. Se dice que María era conocida por su carácter fuerte y su deseo de evitar rodearse de personas que no le agradaban. Por otro lado, Silvia era una actriz joven en ascenso, lo que generaba un ambiente competitivo entre ambas.
Álvarez nunca paró de forzar encuentros entre ellas con la esperanza de que desarrollaran una amistad. Sin embargo, estos intentos solo resultaron en momentos incómodos. A pesar de esto, las dos actrices compartieron un vínculo indirecto a través de sus carreras y sus familias.