Una casa de 68 millones de dólares y el pleito sobre el precio es lo que queda del divorcio de Jennifer Lopez y Ben Affleck
Han pasado más tiempo peleando por culpa de la propiedad de lo que vivieron en ella

Ya salió el divorcio hace semanas, pero Jennifer López y Ben Affleck siguen enfrentados por dinero. Esta vez se trata de la casa que compraron juntos en Beverly Hills, y les está costando muchísimo venderla por su alto precio.
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Según TMZ , el actor de 'The Accountant 2' está dispuesto a vender la mansión por el precio que sea, pero ella opina totalmente lo contrario... Se dice que Affleck quiere bajarle el precio de venta, pero López se niega a pesar de que pronto cumplirá un año en el mercado.
Desde que fue puesta a la venta en julio de 2024, ya el precio de venta de 68 millones de dólares se consideraba exagerado por agentes inmobiliarios familiarizados con la propiedad. De hecho, algunos estimaron que está un 15 % por encima de su valor en el . Los agentes también argumentaron que Affleck y Lopez pagaron demasiado por la mansión, señalando que desembolsaron 60,85 millones de dólares en efectivo por la propiedad en mayo de 2023.
Según profesionales del sector inmobiliario, el mercado de lujo de Los Ángeles parece haberse enfriado, lo que ha dificultado la venta de residencias de alta gama a los precios solicitados. Sus compradores potenciales supuestamente buscaban precios de ganga, y el precio de venta de $68 millones no se ajusta a este nuevo mercado.
Además de todo eso, tras los incendios forestales de enero que devastaron el resto del área metropolitana de Los Ángeles, las primas de seguro están subiendo. El seguro de la mansión supuestamente le costará al futuro propietario medio millón de dólares al año, lo que desalienta a los posibles compradores.
El estancamiento en la venta de viviendas
Los términos del acuerdo sobre la propiedad de las estrellas en Beverly Hills, tras su divorcio a principios de este año, ya están sellados. Los términos no están claros, pero la constante indecisión de la expareja sobre la venta de la casa implica que las emociones sobre los próximos pasos deben estar aún muy vivas.
Fuentes cercanas a la situación afirman que ambos aún luchan por llegar a un acuerdo, lo que deja en el aire el futuro de la mansión. A pesar de la falta de avances, no hay indicios de desacuerdos sobre la venta en sí; más bien, parece tratarse de negociar el precio y las condiciones adecuados.
Por ahora, la propiedad todavía está en el mercado al precio original mientras ambos resuelven los detalles de su relación posterior al divorcio.