La popularidad de la muñeca Labubu se sale de control en Asia y causa demanda por miles de dólares
Los muñecos están en los primeros lugares de las grandes tendencias de 2024. Hasta ahora no eran más que una mezcla entre bebés y monstruitos de plástico, que muchos se cuelgan en las carteras y bolsos, aunque ahora los hay más grandes.
Sin embargo, las cosas ya se están poniendo serias y hasta hay una demanda por muchos miles de dólares en torno a ellos.
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La historia comienza en Malasia con un sorteo de aniversario en un restaurante de Georgetown, Penang, donde se ofrecieron muñecas Labubu como premios.
Una joven llamada Jenny Yee ganó una de estas muñecas, pero pronto surgieron problemas. Después de ganar la muñeca tras gastar solo 15 ringgits malayos, la moneda local, (0,89 dólares) en comida, Yee alegó que había recibido una muñeca falsa.
Esta acusación fue dirigida al propietario del restaurante, quien se disculpó y explicó que no tenía conocimientos sobre la autenticidad de las muñecas, ya que las había adquirido a través de un revendedor.
Se le sugirió a Yee que verificara el número de serie en el sitio web oficial de PopMart, lo cual confirmó que su muñeca era auténtica.
A pesar de esto, Yee continuó insistiendo en que había sido engañada y exigió compensación al propietario del restaurante. Este se mostró dispuesto a reembolsarle si devolvía la muñeca, pero Yee se negó y comenzó a publicar sobre su experiencia en redes sociales, acusando al revendedor de vender muñecas falsas junto con las auténticas.
Las publicaciones de Yee se volvieron virales, lo que llevó al propietario del restaurante a temer por su negocio debido al impacto negativo que podrían tener estas acusaciones.
En un intento por aclarar la situación, Yee afirmó que su intención era responsabilizar al revendedor y no perjudicar al restaurante.
La demanda pasó a tomar turno
Lynette Boey, propietaria del Labubu Toy Store, tomó medidas legales contra Yee. Publicó una carta de demanda en Facebook exigiendo una disculpa pública en sus cuentas de Instagram, Facebook y Xiaohongshu.
La disculpa debía ser aprobada por Boey antes de ser publicada y permanecer visible durante un mes.
Además, Boey exigió que Yee eliminara todas sus publicaciones y comentarios sobre el tema y se abstuviera de hacer acusaciones futuras. También se le pidió que pagara una compensación de RM500,000 (111,012.50, dólares) por las pérdidas sufridas por Boey debido a las afirmaciones de Yee.
Yee tenía siete días para cumplir con estas demandas o enfrentar acciones legales adicionales. Sin embargo, parece que ella ha bloqueado todas sus cuentas en redes sociales, dificultando cualquier comunicación o resolución del conflicto.
La demanda por estos productos ha aumentado significativamente en Malasia, con un incremento del 800% en su popularidad, según algunos informes. En occidente aun no ha llegado a ese nivel, pero los Labubu son tan famosos, que en el viaje de influencers que organizó la casa de joyería Pandora, creadores de contenido como Kuno y la Miss Universo 2023 Sheynis Palacios mostraron en sus redes con orgullo todos los que habían logrado comprar.
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¿Qué son los Labubu y cuál es su origen?
Los Labubu son figuras coleccionables que han ganado gran popularidad en los últimos años, especialmente entre los jóvenes y adultos.
Su diseño es único, combinando elementos de ternura y travesura. Estos pequeños "monstruos" de peluche se caracterizan por tener orejas puntiagudas, dientes prominentes y ojos saltones, lo que les otorga una personalidad distintiva y colores vibrantes.
La historia de los Labubu se remonta a 2015, cuando fueron creados por el ilustrador Kasing Lung en colaboración con POP MART, una empresa china especializada en juguetes coleccionables.
Los Labubu forman parte de la serie llamada 'The Monsters', que incluye varios personajes. Originalmente, estos muñecos se lanzaron en un formato de cajas sorpresa o blind boxes, lo que añade un elemento de emoción al coleccionismo, ya que los compradores no saben qué figura recibirán.
Cada figura está diseñada con gran atención al detalle y a menudo pertenece a ediciones limitadas, lo que las hace aún más deseables.
La popularidad de los Labubu se disparó en 2024, en gran parte gracias a la influencia de la integrante del grupo de K-pop Blackpink, Lisa, quien fue vista con uno de estos muñecos. Este evento catapultó a los Labubu a la fama global, convirtiéndolos en un fenómeno viral en plataformas como TikTok e Instagram.
Además de su diseño encantador, los Labubu han capturado la atención por su mezcla de estilos adorables y elementos góticos, lo que refleja una tendencia creciente hacia productos más creativos y únicos en el mercado de juguetes.
