Denise Burciaga es ahora Sor María, la mujer mexicoamericana que es ahora una monja de clausura en España.

Cuando alguien dice que cambió drásticamente su vida, seguramente piensas, OK, cambió de carrera, pasó de la medicina a las bellas artes, o de los números a la filosofía, etc. Pero, que te digan que decidió dejar todo por servir a Dios, y con el detalle de no solo servir, si no encerrarse, es cada vez más raro, si no, casi imposible hoy en día.

Sin embargo, esto fue lo que hizo Burciaga, una joven estadounidense de origen mexicano, que jamás imaginó que su vida tomaría un rumbo tan drástico. Según publicó el Diario 20 Minutos, Denise nació y se crió en California, su vida parecía estable: tenía amigos, una pareja y un trabajo como administradora en una clínica dental que le gustaba. Pero había algo que la mantenía insatisfecha y, a sus 25 años, enfrentaba una profunda depresión.

Proveniente de una familia creyente y miembro del Camino Neocatecumenal, un movimiento que promueve la renovación de la fe católica, Denise decidió, sin mucho convencimiento, asistir a la parroquia junto a su familia en busca de respuestas.

Fue en una de esas reuniones parroquiales donde escuchó sobre una peregrinación a Roma. Denise, en busca de algo que llenara ese vacío interior, decidió unirse a la travesía. Durante su estancia en Roma, la joven comenzó a abrirse más a su fe y, según sus propias palabras, algo dentro de ella cambió. Al regresar a San Diego, su conexión con la religión se fortaleció. Poco a poco, comenzó a participar más en actividades religiosas y a recuperar la fe que había perdido en su juventud.

Con el tiempo, y tras varios años de crecimiento espiritual, a los 30 años, Denise decidió unirse a un nuevo viaje, esta vez a un monasterio de clausura en Allariz, Galicia. Allí, conoció a las monjas clarisas de clausura, mujeres que dedican sus vidas a la oración y la contemplación. Fascinada por el estilo de vida que llevaban, Denise comenzó a sentir una atracción hacia esa forma de vida que no había experimentado antes. Aunque al principio tenía dudas, su tiempo en Allariz le hizo reflexionar sobre su propósito y lo que realmente quería en la vida.

Denise Buriaga, mexicoamericana monja españa
Monasterio de Santa Clara de Allariz/Cortesía

A su regreso a San Diego, el vacío emocional volvió a aparecer. Fue entonces cuando Denise tomó la decisión más importante de su vida: regresar a Allariz para convertirse en monja de clausura. Dejó atrás su vida en California, a sus amigos, pareja y trabajo, y cruzó el Atlántico para encontrar su camino en un pequeño pueblo de Galicia.

Y así fue que el 29 de septiembre, Denise Burciaga se convirtió oficialmente en Sor María Jerusalén, ingresando al Real Monasterio de Santa Clara en Allariz. Las monjas del convento la recibieron con alegría, ya que hacía casi dos décadas que no había una toma de hábito en el monasterio.

Ahora, a sus 32 años, Sor María Jerusalén ha encontrado la paz que tanto buscaba. Su vida está dedicada a la oración, la preparación de dulces, el estudio del piano, el español y la liturgia. A pesar de lo radical de su decisión, asegura que finalmente ha encontrado su camino, y ya solo le queda esperar otros dos años para tomar sus votos.